Lentos. Cabeza prognata. Protórax muy corto. Primer segmento abdominal soldado al tórax.
Las fotos están tomadas en Kansas, EEUU. Lo que se ve arriba es un fásmido hembra junto al estuche de una cámara de bolsillo, para dar una idea del tamaño.
Abajo: exhibición del Museo argentino de Ciencias naturales “Bernardino Rivadavia”. (MACN)
Arriba: insectos-palo de Indonesia. Probablemente los insectos más grandes del mundo; alcanzan los 30 cm de longitud. Abajo: ”chinche molle” de las regiones áridas de la Argentina.
2.2.1.7. Saltadores (Saltatoria) u Ortópteros (Orthoptera) sensu stricto
Cabeza ortognata. tarsos tetrámeros (4 segmentos). Hembras con ovipositor formado por 3 pares de valvas agudas .
Esa especie de sable rojizo que se ve a la izquierda es el ovipositor. Esta es una langosta verde; un ensífero. Ver abajo.
Suborden Ensíferos (Ensifera)
Grillos, langostas verdes, grillotopos. Antenas filiformes, ovipositor largo en forma de sable.
Grillo. Los machos “cantan” frotando las dos alas anteriores.
El famoso entomólogo francés Pierre Grassé, editos de un monumental texto de mediados del siglo veinte, publicó sobre la oviposición en diferentes familias de ensíferos. Estos dos dibujos están tomados del “Grassé Biblia” (Zoologie III, Encyclopedie de la Pléyade):
https://img.webme.com/pic/t/taxonomia/ovipphaneropter.jpg
|
|
Hembra de faneroptérido (langosta verde: Phaneropteridae) oviponiendo.
|
Oviposición de un conocefálido.
|
Faneroptérido juvenil en una margarita amarilla. Foto tomada en la plaza Giordano Bruno, ciudad autónoma de Buenos Aires.
Suborden Celíferos (Caelifera)
Tucuras, langostas migratorias. Antenas cortas y aplanadas, ovipositor corto con valvas abiertas en el ápice.
A esta pobre tucura la debe haber atacado un pájaro, porque le falta el extremo del abdomen y la puntita de las alas. De todos modos, se pueden observar los segmentos del abdomen y las características de las patas posteriores.
Primero: el fémur está engrosado para contener los músculos del salto.
Segundo: la inserción de los haces musculares es oblicua, y eso se puede ver en la parte de afuera del fémur. Una inserción muscular requiere una saliente, una apófisis, y en los insectos las placas del exoesqueleto sobresalen hacia adentro formando apodemas para la inserción muscular.
Tercero: la cara interna del fémur tiene color vivo. Eso hace que, cuando salta la pequeña langosta, uno vea un relámpago de color diferente... lo pierda de vista... en fin: eso se llama efecto flash.
Como se ve aquí, la tucura inmóvil no es tan fácil de distinguir.
Ejemplar inmaduro. Unos hablan de “ninfas”, otros de “larvas” aunque no haya metamorfosis.
El nombre vulgar “tucura” se usa para insectos de unos dos centímetros de longitud, La famosa langosta migratoria, que no hace sus desastrosas migraciones desde que controlan la densidad poblacional, mide algo más de 5 cm como adulta.
Las mangas de langostas... mi finada madre llegó a verlas.
“Oscurecían el sol.”
“Se comían hasta las cortinas de cretona.”
“El tren no avanzaba: había aplastado tantas langostas que las ruedas patinaban.”
Después digan que la fauna cadavérica es escalofriante.
Las mangas salían de los valles áridos de San Juan y La Rioja, subían a lo largo de la cordillera hasta Bolivia, giraban y volvían a entrar a la Argentina por el noreste.
Para mejor, al pasar por el norte se les sumaban algunas langostas quebracheras (Eutropidacris). En realidad no forman mangas, pero el productor agropecuario que veía tres ó cuatro de estas se llevaba el susto de su vida.
Hay otras familias de Celíferos.
Los Proscópidos (Familia Proscopidae) tinene una forma alargada tipo “bicho-palo”, con la cabeza llamativamente alargada.
La foto es mala, pero se alcanzan a ver las antenas insertas a los costados de la punta que forma la cabeza, llamada fastigio.
Más abajo se ven los ojos compuestos, como un par de bultitos. La boca está alojada en el engrosamiento que se ve por delante de las patas anteriores.
Un joven colega tuvo la gentileza de permitirme fotografiar un proscópido bien grande. El problema sigue siendo la iluminación.
2.2.1.8. Embiópteros (Embioptera)
Pequeños insectos coloniales con tarsos dilatados que contienen una glándula sericígena (productora de seda).
|
|
Hembra áptera; macho alado
|
|
Viven bajo cortezas o sobre piedras, dentro de tubos de seda. Una especie, por lo menos, es bastante común en Buenos Aires si se la sabe buscar. Mientras nosotros vivimos entre paredes manchadas de humedad, ellos se tejen tapices de seda blanca. Después la gente pone cara de asco y pregunta: ”¿Trabajas con biiiiichos?”
2.2.1. 9. Dermápteros (Dermaptera)
Tijeretas
Cercos modificados formando un par de pinzas. Cabeza prognata (piezas bucales dirigidas hacia adelante).
Las hay predadoras, herbívoras y detritívoras. Los adultos pueden ser ápteros, como en el caso de arriba, o tener un par de cortos élitros paralelos (semejantes a los de los coleópteros, pero muy cortos), bajo los cuales están plegadas las alas posteriores membranosas. Estas últimas son muy anchas y tienen un sistema de plegado complejo, para el cual el insecto usa sus cercos en forma de pinza.
Las hembras cuidan de sus huevos, cosa excepcional entre los polineópteros.
2.2.2. Paraneópteros (Paraneoptera)
2.2.2.1. Heterópteros (Heteroptera)
Chinches. Rostro (pico) inserto en la parte anterior de la cabeza. Esta foto es de un coreido (familia Coreidae).
Tienen su página propia.
2.2.2.2. Homópteros (Homoptera)
Chicharras, pulgones y cochinillas. Rostro inserto en la parte posterior de la cabeza.
Abajo a la izquierda: exuvia (cutícula vacía) de una larva de cigarra.
Los estadíos inmaduros viven bajo tierra, chupando savia de las raíces; las cigarras adultas tienen alas. Las cigarras se mueren en invierno. Lo aclaro porque todavía hay gente que cree que las mismas cigarras que cantaron durante el verano se entierran para pasar el invierno.
En otro suborden están los pulgones y las cochinillas. Los pulgones son practicamente una bolsita de tejidos con patas y antenas, pero tienen unos estiletes mandibulares tan largos que forman un rollo en el interior del animalito.
No se ve muy bien, pero aquí hay pulgones adultos con alas y sin alas. Los pulgones alados tienen un poco más de “anatomía de insecto”, ya que los músculos de vuelo necesitan apoyarse en alguna pieza más rígida.
Lo que es más, los pulgoncitos nacen vivos.
https://img.webme.com/pic/t/taxonomia/pulgon2.jpg
Además de antenas y patas, los pulgones tienen un par de tubitos en el extremo posterior del abdomen. Se llaman cornículas, que es como decir cuernitos. No son apéndices. Producen un líquido pegajoso que parece molestarles bastante a los predadores. Excepto, claro, a las crisopas y las vaquitas de San Antonio.
Larvas de vaquita de San Antonio alimentándose de pulgones en una margarita amarilla. Ver más en la página "Plaza Giordano Bruno".
Los pulgones del rosal son negros. Los cereales son atacados por pulgones verdes (el INTA tiene cosas que decir sobre el pulgón verde de los cereales). Yo me crié con la convicción de que los pulgones eran amarillos con apéndices negros: sólo conocía los de la “bandera española” Asclepias curassovica.
Las cochinillas tienen una anatomía más simple todavía. Las larvas recién nacidas tienen seis patas y caminan un poco, pero luego se quedan en un lugar de la planta, desarrollan una escama protectora, y van degenerando, hasta que las hembras maduras son simples sacos de huevos.
La cochinilla cerosa, Ceroplastes grandis, muy frecuente sobre el laurel-rosa y otros arbustos ornamentales.
Psílidos (Psyllidae): son los insectos que “hacen llorar” a la “tipa” (Tipuana tipu).
Los esternorrincos (pulgones, cochinillas, psílidos) se alimentan de savia, que contiene nutrientes bastante diluídos. Poseen un interesante aparato de filtro en el tubo digestivo. Cada tanto, eliminan agua azucarada, mientras las sustancias nutritivas se acumulan.
Esa agua azucarada puede cubrir las hojas de la planta de la que se están alimentando los insectos, y con mala suerte proporciona el sustrato para hongos patógenos, por ejemplo las variedades de tizón.
Pero eso no es todo. Ese desecho del pulgón o de la cochinilla, que se llama mielado (inglés honeydew), es aprovechado por muchos organismos, comenzando por las hormigas.
En la península del Sinaí hay (o solía haber) montes de taray o tamarisco, ese arbolito que aquí se planta para fijar los médanos, y en cierta época del año las cochinillas producían tanto mielado que se podía aprovechar. Eso es el maná.
2.2.2.3. Tisanópteros (Thysanoptera)
2.2.2.4. Anopluros (Anoplura)
Piojos verdaderos. Achatados. Patas terminadas en pinzas. Piezas bucales picadoras.
Manual de entomología médica y veterinaria argentina”, por Eduardo Del Ponte, 1959. Un clásico.
El piojo de la cabeza y el piojo del cuerpo se comportan de diferente manera. ¿Son dos especies? ¿Dos subespecies? Los criterios cambian, y según el criterio cambia el resultado.
Pediculus humanus ssp corporis
Pediculus humanus ssp. capitis
o bien
Pediculus corporis
Pediculus capitis
En este momento se usa más la segunda nomenclatura.
Las liendres son sencillamente los huevos de los piojos. La hembra cementa sus huevos a un cabello, por lo común detrás de las orejas.
Otro desagradable huésped del cuerpo humano es la ladilla, que se aferra a los vellos de la piel, incluyendo cejas y pestañas, pero jamás al pelo de la cabeza. Es una cuestión de calibres. Las pinzas de las patas de la ladilla (Pthirus pubis) son más grandes que las de los piojos.
Al parecer, es perfectamente posible pescarse una infestación de eso por usar ropa ajena.
Los piojos de otros animales pueden tener un aspecto impresionante, pero no se pasan a los humanos. En eso hay una diferencia con las pulgas.
Cabeza del piojo del cerdo, Haematopinus suis.
2.2.2.5. Malófagos (Mallophaga)
“Piojos” roedores de las aves o de los mamíferos. Piezas bucales mordedoras.
2.2.2.6. Socópteros (Psocoptera)
“Piojos” de los libros. Cuerpo redondeado, blando.
Hay especies que tienen alas como adultos; esas suelen vivir en grupos familiares (no se puede hablar de comunidades) sobre troncos de árbol.
Las especies que atacan libros son ápteras. En realidad comen hifas de hongos, pero pueden alterar la terminación de la hoja. Se los ha señalado sobre cereales almacenados, pero está bastante claro que no los comen; su presencia indica condiciones de humedad.
El socóptero alado es semejante a una especie que vive sobre corteza de árboles, en grupos de adultos y juveniles. El áptero es el ”piojo de los libros”.
2.2.3. Oligoneópteros (Oligoneoptera)
Vamos a ponerlos en página aparte.